Evolución, no revolución

Tengo la impresión de que nos están metiendo los coches eléctricos con calzador, y no por convicción, sino por obligación. Nos están vendiendo una revolución, cuando lo que necesitamos es una evolución para llegar a la meta. El automóvil está cambiando, la movilidad… pero no se pueden poner grandes retos sin estar preparados para ello.

¿Tenemos infraestructuras? ¿Tecnología? ¿Están las ciudades y pueblos preparados? ¿Alguien está pensando en los clientes? La gente no puede comprarse un coche eléctrico con los precios que tienen; no se puede hacer un viaje sin tener puntos de recarga, no solo durante el trayecto, sino en el destino. Y no somos negacionistas, pero cuando un cliente no compra, tiene razón. Y sí, los coches eléctrico van subiendo ventas, pero ¿al ritmo que se esperaba? En España, en el último mes se ha vendido el 4,89% del total. O los dirigentes son más sensibles con la industria del automóvil, o se la cargan: aquí y en Europa. Y ahora mismo obligan a los fabricantes a hacer coches para ellos, para “su revolución”, no para los clientes, que ni demandan esas tecnologías, ni pueden comprarlas.

Buena lectura.